Sin embargo, otros rumores apuntaron a que fue el equipo de Milton Keynes el que hizo el test. La prueba de seis días, con la participación de Renault, el proveedor de motores de las escuderías de las bebidas energéticas, habría tenido lugar entre el útimo test de pretemporada en la pista de Baréin y el inicio de la temporada en Australia.
Los rumores se basan en unos mensajes publicados en la red de microbloging a principios de marzo del piloto de pruebas de Red Bull António Félix da Costa. En ellos, el portugués escribió que se dirigía a Austria para un viaje de cinco días. Dos días después, el piloto añadió: "Pasando el fin de semana en Graz, Austria. ¡Aunque no por elección!".
No obstante, las especulaciones sobre la prueba ilegal no comenzaron a circular hasta que alguien hizo llegar mensajes a la FIA, así como a los equipos Mercedes, Ferrari y Sauber. Así pues, el diario alemán Bild dijo que el equipo campeón del mundo está acusado de haber hecho pruebas en las instalaciones que tiene en Graz (Austria).
RED BULL DEFIENDE SU LEGALIDAD.
Red Bull ha salido al paso de los rumores sobre un test supuestamente ilegal que han llevado a cabo junto a Toro Rosso y que saltó ayer en los medios de comunicación. El equipo tetracampeón del mundo de F1 lo negó todo hasta ayer jueves, pero hoy han decidido aclarar que la prueba efectivamente existió, pero se llevó a cabo en un banco de pruebas, algo que no prohibe la normativa.
Según el equipo de Milton Keynes, probaron en el banco de pruebas de la empresa AVL en Graz (Austria) entre el último test de pretemporada de Baréin y el primer Gran Premio de la temporada, una decisión con reminiscencias del Pirelligate de 2013, cuando Mercedes rodó con la marca milanesa en Barcelona sin conocimiento de la FIA.
"La prueba mencionada en el artículo estaría permitida por la reglamentación", comunicó la escudería de las bebidas energéticas, en referencia a la información publicada por la revista alemana Auto Bild, donde aseguraban que todo se destapó cuando una persona anónima escribió cartas a la FIA y a equipos rivales como Ferrari, Mercedes y Sauber.
"Auto Bild Motorsport sabe que un chasis de Toro Rosso sin alerones delanteros ni traseros corrió en el banco de pruebas sin un flujo de aire del túnel de viento".
"Por lo tanto, el test fue en un banco de pruebas y totalmente legal. La identidad del autor de la carta anónima sobra", añadió el comunicado de Red Bull.
Por su lado, Toro Rosso y Renault no quisieron comentar lo sucedido.
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